La declaración de guerra por parte de Estados Unidos a México fue el 11 de mayo de 1846, cuando el Congreso de Estados Unidos aprobó formalmente la resolución que declaraba la guerra contra México. Este acto marcó el inicio oficial de la Guerra Mexicano-Americana, un conflicto que tuvo profundas consecuencias para ambos países y se originó principalmente por disputas territoriales relacionadas con la anexión de Texas y el control de territorios fronterizos.
Posteriormente, México declaró la guerra diez días después, el 23 de mayo de 1846, en respuesta a la declaración estadounidense y a la invasión de territorios mexicanos por parte de las fuerzas estadounidenses.
