Un ser humano adulto tiene generalmente 206 huesos en su esqueleto. Este número puede variar ligeramente debido a la presencia en algunas personas de huesos adicionales como los sesamoideos o huesos suturales del cráneo. En los bebés, el número de huesos es mayor, aproximadamente 300, porque muchos huesos se fusionan durante el crecimiento para formar los huesos adultos. El esqueleto humano se divide en dos partes principales: el esqueleto axial (80 huesos) y el esqueleto apendicular (126 huesos), que juntos suman esos 206 huesos. Estos huesos cumplen funciones de soporte, protección de órganos, movimiento, producción de células sanguíneas y almacenamiento de minerales.
