El boldo es una planta medicinal principalmente utilizada para estimular y favorecer el funcionamiento del hígado y la vesícula biliar, ayudando a la producción y liberación de bilis, lo que contribuye a mejorar la digestión, especialmente de las grasas. Además, la boldina, uno de sus alcaloides principales, tiene propiedades protectoras del hígado y puede prevenir la formación de cálculos o piedras en la vesícula. El boldo también ayuda a aliviar molestias digestivas como dolor estomacal, gastritis, gases y pesadez. Posee propiedades antioxidantes, antiinflamatorias y depurativas, que favorecen la eliminación de toxinas y pueden reducir la retención de líquidos. Asimismo, tiene un efecto calmante que puede ayudar a reducir el nerviosismo y mejorar el sueño. Sin embargo, debe usarse con precaución, evitando su consumo prolongado y en personas con problemas hepáticos graves, mujeres embarazadas o lactando.
En resumen, el boldo sirve para mejorar la salud digestiva y hepática, proteger el hígado, facilitar la digestión, aliviar molestias estomacales y promover la eliminación de toxinas, con efectos secundarios que deben ser vigilados.
