El gazpacho es una sopa fría tradicional de la gastronomía española, especialmente asociada con Andalucía. Se elabora principalmente a partir de vegetales crudos como tomates, pepino, pimiento y cebolla, que se trituran y se mezclan con ajo, aceite de oliva, vinagre y sal; a menudo se añade pan para espesar. Se sirve frío y suele acompañarse de tropezones o picadillos de las hortalizas para darle textura. Existen variaciones regionales, como el gazpacho blanco o el gazpacho verde, que sustituyen o suplementan el tomate con otros vegetales. Es un plato muy popular durante los meses de verano por su frescura y concentración de sabores.
