Un enlace químico es la fuerza que une a los átomos para formar compuestos químicos, otorgándoles estabilidad. Esta unión se realiza mediante la cesión, ganancia o compartición de electrones en la capa externa o de valencia de los átomos, y puede romperse bajo ciertas condiciones como la aplicación de calor o electricidad.
Características del enlace químico
- Une átomos para formar sustancias homogéneas, no separables por métodos físicos.
- Los átomos buscan una configuración estable similar a la de los gases nobles, generalmente un octeto de electrones en su última capa.
- La energía que se requiere para romper un enlace se llama energía de enlace.
- Es fundamental para formar moléculas tanto orgánicas como inorgánicas y es la base de la existencia de los organismos vivos.
Tipos principales de enlace químico
- Enlace covalente: Compartición de pares de electrones entre átomos no metálicos. Ejemplo: agua (H2O).
- Enlace iónico: Transferencia de electrones entre átomos metálicos y no metálicos, formando iones con cargas opuestas que se atraen. Ejemplo: cloruro de sodio (NaCl).
- Enlace metálico: Unión entre átomos metálicos donde los electrones se mueven libremente en una "nube" electrónica. Ejemplo: barras de hierro o cobre.
En resumen, un enlace químico es esencialmente la atracción o unión entre átomos mediante electrones compartidos o transferidos, creando moléculas y compuestos estables.