En los últimos días, Australia ha sido noticia principalmente por un grave ataque en Sídney y por una nueva ley sobre redes sociales. A continuación tienes un resumen muy breve de lo más relevante.
Ataque en Bondi Beach
En Bondi Beach, una de las playas más famosas de Sídney, se produjo un tiroteo masivo durante una celebración de Hanukkah organizada por la comunidad judía, dejando al menos una decena de muertos y decenas de heridos según los primeros balances oficiales.
Las autoridades lo tratan como un atentado terrorista y lo han calificado explícitamente como un acto de antisemitismo, lo que ha provocado un fuerte despliegue policial y un debate interno sobre seguridad y discurso de odio.
Reacción política y social
El primer ministro Anthony Albanese ha condenado el ataque como un acto “maléfico, antisemita y terrorista” y ha prometido recursos extraordinarios para la investigación y la protección de la comunidad judía.
Organizaciones judías en Australia y en el extranjero han expresado conmoción y han pedido medidas más duras contra el antisemitismo, mientras aumenta la presencia policial alrededor de sinagogas y centros comunitarios.
Nueva ley sobre redes sociales
Paralelamente entró en vigor una ley pionera que prohíbe legalmente el acceso a redes sociales y ciertas plataformas de vídeo en línea a menores de 16 años en todo el país.
El gobierno argumenta que es necesaria para proteger la salud mental de los adolescentes, pero críticos y algunas plataformas han cuestionado su eficacia, su impacto en la libertad de expresión y la dificultad práctica de hacerla cumplir, hasta el punto de que ya hay demandas judiciales en curso.
Debate interno en Australia
Estos dos temas —terrorismo y antisemitismo por un lado, y regulación de redes sociales por otro— dominan ahora mismo la agenda pública y mediática australiana.
Se discute tanto cómo reforzar la seguridad sin estigmatizar comunidades, como hasta qué punto el Estado debe intervenir en la vida digital de los menores.
