Para un altar de muertos tradicional, se suelen incluir los siguientes elementos, con significados asociados:
- Una foto o retrato del difunto.
 - Flores de cempasúchil (caléndulas) para guiar a las ánimas y adornar la ofrenda.
 - Pan de muerto y otras comidas o dulces para los difuntos.
 - Agua para saciar la sed de las ánimas.
 - Sal para purificación y preservación.
 - Velas o veladoras para iluminar el camino de regreso.
 - Copal o incienso para purificar el ambiente y alejar malos espíritus.
 - Papel picado, que simboliza la unión entre la vida y la muerte y permite que el viento lleve las plegarias.
 - Objetos personales o juguetes, especialmente para niños difuntos, para personalizar la ofrenda.
 - Elementos católicos opcionales (cruces, imágenes de santos, rosarios) dependiendo de la tradición familiar.
 
Notas sobre variaciones:
- En algunas regiones y familias, pueden añadirse objetos personales, calaveritas de azúcar o chocolate, y representaciones de elementos de la naturaleza (agua, fuego, tierra) mediante imágenes o símbolos.
 - Si la ofrenda tiene un enfoque cristiano, es común incluir símbolos cristianos y una cruz, así como imágenes de la Virgen o de santos.
 - La distribución del altar puede variar: una estructura de varios niveles facilita colocar cada grupo de elementos de manera organizada y facilita la lectura simbólica de la ofrenda.
 
Si necesitas una lista adaptada a una región específica o a una tradición familiar particular, dime cuál y ajusto los elementos y sus significados.
