El origen de Halloween se remonta a las fiestas célticas, especialmente a Samhain, una celebración que marcaba el final de la cosecha y el inicio del invierno en Irlanda, Escocia y otras regiones británicas. Con el tiempo, estas tradiciones se fusionaron con prácticas cristianas y con influencias de otras culturas europeas, dando forma a la celebración que hoy conocemos. Breve resumen por fases:
- Orígenes celtas: Samhain (aprox. 31 de octubre) era la noche en que se creía que el velo entre los vivos y los muertos era más delgado; se encendían hogueras y se llevaban disfraces para ahuyentar espíritus.
- Influencia cristiana: Con la expansión del cristianismo, la Iglesia dio lugar a All Hallows’ Eve (víspera de Todos los Santos), que con el tiempo derivó en Halloween. Esto ayudó a integrar algunas costumbres paganas en una celebración cristiana.
- Migraciones y globalización: Durante el siglo XIX y posteriores, la emigración irlandesa y escocesa llevó estas tradiciones a otros países, especialmente a Estados Unidos, donde evolucionaron hacia las prácticas modernas de disfraces, “trick-or-treat” y decoración.
- Perspectiva contemporánea: Aunque hoy Halloween es muy popular en Estados Unidos, Canadá, Europa y otros lugares, sus raíces siguen en Samhain y en la mezcla de tradiciones gaélicas, romanas y cristianas que se produjo a lo largo de los siglos.
Si quieres, puedo ampliar con detalles de cada etapa, ejemplos simbólicos asociados (hogueras, calabazas talladas, etc.) o explicar cómo diferentes regiones celebran Halloween hoy en día.
